Hace ya muchos años en el cuadernillo CANES, que editaba el Club Canino del Valle, se publicaban estas Notas y en alguna de ellas preguntaba porque no se facilitaba el registro de perros en el país.

Pues nada se ha hecho en ese sentido desde entonces. En consecuencia, los criadores informales y algunos que rayan en lo criminal pululan; los traficantes de cachorros están a la orden del día y el sofisma del comprador selectivo ya no aplica; la ciudadanía paga fortunas por todo tipo de perros de supuestas razas, obviamente sin registro o con “papeles” de cualquier índole.

El nr de registro debería tan solo ser solo la identificación del perro, como la CC lo es para todos los colombianos. Cuando se presenta la Cédula no se está garantizando ni idoneidad moral, conocimiento académico o solvencia económica de la persona.

La calidad del perro registrado la certifican los certificados de trabajo donde aplica y los campeonatos de estructura ganados

Tan solo se han registrado cerca de 74 mil perros en 64 años de vida de la ACCC.

Desde el contexto Latinoamericano somos los últimos en el número de cachorros registrados en 2019 fue de 1880 y por debajo de países mucho más pequeños como Costa Rica con 4000 registros.

La industria de las mascotas ha crecido en los últimos 5 años en promedio +63%, pero los registros en los últimos 4 años han disminuido MENOS 2%. Obviamente hay una asimetría entre el crecimiento del mercado y el decrecimiento de los perros registrados.

Porque no facilitar las cosas y aumentar el nr de perros registrados y de paso fortalecer las finanzas de los clubes caninos?